LA ESPERANZA PUEDE CONVERTIRSE EN EL PEOR ASESINO Un laboratorio de Manhattan está a punto de encontrar la cura para una de las enfermedades más aterradoras de las últimas décadas. Los resultados de las pruebas están siendo un éxito, pero el ensayo está provocando muertes inesperadas. En menos de un mes, alguien ha asesinado a dos de los cuarenta pacientes sometidos al tratamiento y a uno de los doctores responsables de la clínica. Y seguramente no se detendrá ahí.